
Que ya no seas, que te enrarezcas y te pierdas de ti, roído de dolor, que deambules arrojado al infierno de esas calles donde no me encontrarás, que transites por aquellas aborreciendo el desgarro de tus puños crispados al no hallarme.
Que te arrastres por otros cuerpos reptando y mordiéndote los labios ensangrentados para no nombrarme, que el pensamiento lo tengas enredado a mi pubis, encadenado a la rabia de mi olor, que te arrases, te devastes completando la obsesión, que toda yo sea la herida abierta en tu piel ardiente y repudiada, que te sobresaltes al roce, que te retuerzas hechizado y necesites más llagas para respirar el final borrascoso de tu abismo.
Que desees morir, soberbio en tu goce perturbado, que rasgues tu piel buscándome, que la ira relegue a un rincón oscuro de tu cuarto y te estés allí, acurrucado, perdido, las manos aferradas a tu sexo que estalla de mí sabiéndome lejos y palpes la viscosa soledad que te escurre para ir envejeciendo así, encorvado por lo irremediable, la torturante certeza desolada de no tenerme nunca, de dolerte siempre, mientras me sabes aquí en esta noche, perpetrando este designio maldito.
9 comentarios:
merd! no quiero esa maldición!
vade retro*
CHE
Uuuff!, espero que nadie me maldiga de esa manera, jajajajajja!!!
Besos selváticos.
Yo tampoco la quiero...arranco de esa maldición; es peor que Paquita la del Barrio con su Rata de Dos Patas. En todo caso, quizás vale la pena en contadas ocasiones (pero muy contadas).
Saludos cordiales.
soy un admirador de Pia
Que bonito cuento y por cierto las fotos están cada día mejor. Saludos!
Te pillo enfadada?
Un besote
Todo lo que describes es verdad, tu eres el sueño de un gran masturbador...
no puedo ver, ni hablar, ni tocar, ni besar "TE", pero puedo leerte, que ya es mucho!!!
un cyberbeso
Botellita de jerez que todo lo que escribes sea al revez... GGGG; XD
Muy buen texto... hasta me hizo recuerdo a una muchacha que desee tanto pero tanto y que no pude cortejar porque resulto ser la enamorada de un conocido muy estimado ... ;)
No se lo desearia ni a mi peor enemigo.
Publicar un comentario